Cómo crear un rincón de la calma en casa

Hoy nos gustaría mostrar la importancia de aprender a regular nuestras emociones en familia, algo que se puede llevar a cabo mediante la creación de un rincón de la calma en nuestro hogar. 

¿Qué es un rincón de la calma? 

Un rincón de la calma es un espacio de nuestra casa, que será destinado a sentir tranquilidad, desconexión, autocontrol… Un lugar donde seremos capaces de regularnos, disminuir la ansiedad que diferentes situaciones nos pueden provocar, reconducir nuestras emociones y sentir la calma para la que se destina este rincón. 

Para que sea de utilidad para todos los miembros de la familia, es muy importante que cada uno/a participe en su creación, aportando lo que crea necesario para conseguir su calma y convertir este rincón en un espacio de bienestar común. De esta manera, se transmite que todos/as necesitamos un rincón de la calma, donde gestionar nuestras emociones, independientemente de nuestra edad, algo que servirá de ejemplo y modelo para los/las más peques, e imitarán nuestro comportamiento. 

El ejemplo que mostramos, es una de las herramientas más potentes en la crianza.  

La existencia de este rincón en casa aporta gran seguridad para todos los miembros de la familia. En este espacio, seremos capaces de identificar nuestras emociones, regularlas y hacernos cargo de ellas. Por ello, el disfrute de este espacio debe interpretarse como algo positivo, lejos de “los rincones para pensar”, donde los/as menores suelen ser enviados como castigo. En este caso, el rincón de la calma es algo positivo, que nos proporciona emociones de bienestar y donde acudimos cuando lo necesitamos. 

La creación de vuestro rincón de la calma debe ser algo personal y adaptado a las necesidades de cada uno/a, pero os sugerimos algunas ideas que os pueden resultar útiles como: utilizarlo para leer, teniendo accesible algún libro que nos calme, música relajante, una taza de té/café… los/as peques pueden tener también algún libro para leer o pintar, como por ejemplo el cuento de “El monstruo de colores” y el muñeco de este cuento que representa a la calma. Sería recomendable que también incorporen su música, algún juego, plastilina, o cualquier otro juguete que les invite a centrar su atención en él. Es fundamental que, a pesar de guardar allí diferentes accesorios, se mantenga el orden, por ello os recomendamos incorporar alguna caja o cajonera que os facilite esta labor. El orden también nos transmite calma y hay que conservarla. 

Esperamos haberos ofrecido algunas ideas para la creación de vuestro rincón de la calma. Es posible que no funcione como os gustaría desde el principio, pero no olvidéis que crear un hábito implica un tiempo, y este rincón necesita también de ese tiempo en el que aprendamos a disfrutarlo y obtener el objetivo buscado. 

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Leticia López y Patricia de Calatrava
Terapeutas de Familia y de pareja  

¿Cómo dejar el chupete? claves para acompañarles en este proceso

Hoy os traemos algunas ideas para ayudar a nuestros hijos e hijas a dejar el chupete. Quizá ya hayas pensado que es un buen momento para que deje de usarlo, o te preocupe su dentición y los daños que le pueda provocar. Quizá te preocupa la adicción que parece que tiene al chupete o que, ya solo lo necesita puntualmente y quieres aprovechar para que lo deje del todo. Antes de dar el paso te ofrecemos unas reflexiones para que le acompañes en este proceso.

¿Qué significa el chupete para él/ella? 

Siempre vamos a tener en cuenta las necesidades de los niños, en este caso nos preguntaremos ¿qué necesidad cubre el chupete? Le ofrece consuelo, calma, le tranquiliza, le hace sentir seguro… Por ello lo piden sobre todo para dormir o cuando necesitan consuelo. 

Quitarlo en un proceso, no es conveniente retirarlo de un día a para otro.  

Primero ir acortando los tiempos, hasta llegar a usarlo solo para dormir, y solo si lo pide, algunos niños lo dejan de pedir y así se concluye su etapa de chupete. 

Mejor no tenerlo a la vista ni a su alcance. 

Cuando estemos en este proceso de retirada paulatina ofrecerle alternativas para su consuelo (nuestro abrazo, cogerle un ratito, que coja un peluche…) 

Decidir su retirada total cuando no coincida con otros momentos estresantes (nacimiento de un hermano, cambio de domicilio o inicio de curso) 

Durante el proceso le vamos a ir explicando que ya no es un bebé, y que ya no necesita chupete, que necesita otras cosas. 

Tenemos que entender que es un proceso de duelo, de gran pérdida que va a tener que elaborar 

Personalmente cuando me tocó enfrentarme a este proceso con mis peques, busqué información al respecto. Y no me convencían algunas propuestas como; impregnar la tetina con sabores desagradables, coserle un hilo, recortar poco a por la tetina “como si se desgastara”…me parecía que era poco respetuoso para el niño. Al final veía que todas esas propuestas eran “algo dado”, no se incorpora al niño  en el proceso de retirada sino que “sufre las consecuencias”. 

Otras sugerencias que encontré fueron; ofrecerle el chupete a los Reyes Magos o a otros personajes importantes pata el niño o niña. Me convencían más ya que le hacemos partícipe. 

La idea que me gustó más fue la que leí en un libro de la psicóloga Rosa Jové “La crianza feliz”, libro que os recomendamos. Y la idea era “pagar con el chupete un juguete que el niño desee”. Así que podemos ir con él o ella a una tienda, y dar la opción de un juguete que sabemos que le gusta o dejar elegir entre dos opciones limitadas. En nuestro caso inducimos el deseo, fuimos varias veces a una tienda y les dejamos elegir entre varios muñecos de tipo dou-dou, ya que queríamos algo blandito para dormir.  

Hay que estar seguros de que el niño ha entendido la negociación y que lo haga él mismo. 

Aunque todo este proceso haya ido bien, tenemos que tener en cuenta que los días posteriores van a ser difíciles, que está en proceso de duelo. Puede estar irritable porque lo echa de menos, o que tenga más dificultad para conciliar el sueño, o que tenga ratos de llorar de auténtica pena… Tendremos que tener una dosis extra de paciencia, así que hay que elegir también un buen momento para nosotros/as ya que vamos a tener que ofrecerle más consuelo y cariño.  

Esperamos haberte dado algunas ideas que te inspiren para este, a veces, difícil proceso. No nos olvidemos que, quizás, nos cuesta más a los papás y mamás dar el paso. Suelen sorprendernos con su capacidad de adaptación. 

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Leticia López y Patricia de Calatrava 
Terapeutas de Familia y de pareja